Altaïr, mezclado con varios eruditos.
Los eruditos eran estudiosos de la religión cristiana o islámica, que solían viajar por las ciudades en grupo; dado el carácter religioso de la sociedad en la Edad Media y el principio del Renacimiento, los eruditos eran vistos con buenos ojos y se les permitía su entrada a áreas restringidas a ciudadanos comunes. Por esta ventaja, los Asesinos buscaban tener una buena relación con estos grupos.
Eran "hombres santos" que por lo general vagabundeaban por las ciudades en pequeños grupos durante la Tercera Cruzada, en profunda oración. En Jerusalén y Damasco eran ascetas musulmanes y usaban turbantes. En Acre eran monjes cristianos y llevaban capuchas.
Altaïr Ibn-La'Ahad aprovechó las similitudes entre las túnicas de Asesinos y el atuendo de los eruditos para confundir a los guardias. También podría alentar la aparición de grupos adicionales de eruditos en las ciudades y sus alrededores por salvarlos de guardias abusivos.
Funciones[]
Si Altaïr se mezclaba con los eruditos, caminarían en una formación de diamantes a su alrededor. Esto protegía a Altaïr de todas las direcciones, y así los eruditos podían ayudar a Altaïr de dos maneras diferentes.
Cada entrada de las tres grandes ciudades y algunos senderos hacia áreas restringidas dentro de ellos estaban bloqueadas por una falange de guardias, que empujaban a Altaïr lejos si intentaba entrar. Los eruditos solían estar situados cerca de ellos, lo que permitía a Altaïr entrar fácilmente en el área restringida sin alarmar a nadie y comenzar una lucha uniéndose a ellos. La razón de esto era que los guardias permitían que los eruditos pasaran desapercibidos, lo que garantizaba a Altaïr un acceso fácil sin escalar edificios o luchar.
Si Altaïr estaba siendo perseguido por los guardias y lograba romper su línea de visión, podía mezclarse con los eruditos y engañar a los guardias haciéndoles creer que había desaparecido. Para hacer esto, Altaïr se movía al centro del grupo y comenzaba a caminar con ellos, bajando la cabeza y juntando sus manos para parecer como si estuviera rezando.
Si Altaïr estaba fuera de la línea de visión de los guardias cuando comenzara a mezclarse con los eruditos, los guardias se daban por vencidos en la persecución después de unos momentos. Sin embargo, si Altaïr todavía podía ser visto por los guardias e intentaba acercarse a un grupo de eruditos, detendrían sus oraciones y huirían aterrorizados, rompiendo su formación.
Historia[]
En 1190, Altaïr se disfrazó de erudito para ingresar al campamento cruzado que sitiaba a Acre.[1]
El líder sarraceno Salaḥ Al'din había alentado a los eruditos a visitar y pasar el tiempo en las ciudades de Damasco y Jerusalén, que era presumiblemente por qué los guardias de la ciudad siempre les permitían, y por extensión a Altaïr, pasar a través de las puertas de la ciudad sin obstáculos.[2]
Sibrand, líder de la Orden Teutónica así como también un miembro de los templarios, tomó el método de Altaïr para mezclarse con los eruditos y públicamente maltrató y asesinó a un erudito cristiano, acusando al hombre de trabajar con los Asesinos. El cuerpo del erudito fue arrojado al mar.[3]
Mientras estaba en Chipre, Altaïr no pudo mezclarse en varias áreas sin ningún erudito, como Limasol, el Castillo Kantara, el Castillo Buffavento, el Castillo de San Hilarión y el Archivo, ya que la presencia de un "erudito" solitario causaba sospecha.[4]
Ezio mezclándose con un grupo de eruditos.
Siglos más tarde, ocasionalmente se podían encontrar monjes cristianos deambulando por las calles y los campos en la Italia renacentista, como en el monasterio Monte Oliveto Maggiore. Aunque Ezio Auditore da Firenze fue capaz de mezclarse con cualquier multitud, un incidente que recuerda a los eruditos ocurrió en 1497, donde se mezcló con un grupo de monjes para pasar por una puerta de la ciudad vigilada y acceder a Florencia durante la Hoguera de las Vanidades.[5]
Galería[]
Curiosidades[]
- El logro, Procesión de los Píos, podía ser obtenido por mezclarse con eruditos 20 veces.
- Altaïr normalmente no podía matar eruditos usando cualquier arma; sin embargo, arrojarlos al agua los haría ahogarse.
- Los eruditos que Altaïr salva suelen lucen distintos a aquellos con los que puede mezclarse. En Damasco y Jerusalén, estos llevan turbantes que solo cubren la cabeza, mientras que los otros les cubre la cabeza y los lados del rostro. En Acre, los eruditos salvados vestían túnicas con un diseño distinto, colores oscuros y un crucifijo.
Apariciones[]
- Assassin's Creed: Altaïr's Chronicles
- Assassin's Creed (primera aparición)
- Assassin's Creed: La Cruzada Secreta
- Assassin's Creed: Bloodlines
- Assassin's Creed II
Referencias[]
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